Dimorfismo sexual en los periquitos

La distinción entre un macho y una hembra de periquito es uno de los dimorfismos más fáciles, pues solo consiste en ver el color de la cera una vez el ejemplar es adulto. Antes de serlo, la cera tanto en los machos como en las hembras es de un mismo color, “amarronado”. La cera se encuentra en la parte superior del pico, alojando los orificios nasales. Es una membrana de cuyo color indica el sexo del ejemplar.
Pero no siempre se cumple esto, hay algunos casos extraños en los que no se puede saber el sexo del periquito porque la cera no ha adoptado, al llegar este a la madurez sexual, ningún color que lo determine quedándose con el color suave de los pollos jóvenes. Esto ocurre en mutaciones recesivas. Aquí tenemos un ejemplo de un macho en el que la cera no hace distinción de su sexo.
La edad es un factor que en esta especie se nota en los ojos principalmente. El iris es, en un ejemplar joven, apenas es visible y la gran parte del ojo es toda negra. En un ejemplar adulto ya maduro, el iris es muy visible y se nota como un circulo brillante pudiendo ser de diferentes colores alrededor de la pupila negra. Esto es generalizado, no obstante, existen excepciones en las que el iris no se nota, la variedad recesiva ojos negros, en la cual no se diferencia aunque sea adulto el iris de la pupila.